La mañana de este martes en Bienvenidos se vivió un tenso momento entre el presentador Nicolás Larraín y las periodistas Mirna Schindler y Mónica Pérez.
El contexto fue un enlace en vivo con el concejal de San Felipe Christian Beals, quien en un programa radial local lanzó un chiste bastante machista que provocó, días después una funa en pleno concejo municipal.
El médico de profesión preguntó por los premios de un concurso que impulsaba la red de comerciantes locales de la comuna, y antes que los locutores respondieran, Beals los interrumpió: “En el hospital, cuando hay concursos, se ganaban una enfermera”.
La frase causó extrañeza de inmediato en el espacio radial, a lo que el concejal respondió simplemente que “ustedes no tienen sentido del humor”.
Estos dichos provocaron que el Colegio de Enfermeras emitiera comunicado público en contra de los dichos del concejal Beals, y la polémica se instaló en algunos medios como la televisión.
Es por eso que Bienvenidos quiso conocer su posición al respecto, a lo que él contestó que fue un error, ofreció disculpas y aseguró, de paso, que también había un tema político en el medio y que este alarde era obra prácticamente del Partido Comunista.
En el estudio, en tanto, también se vivió una intensa discusión entre algunos de los panelistas, la que se encendió los ánimos entre Larraín, Pérez y Schindler.
Y es que el locutor radial indicó que no estaba de acuerdo con las funas y que si el concejal ya había ofrecido disculpas, debían aceptarse y bajar las revoluciones. Asimismo, increpó a Mirna diciéndole que si esto hubiese pasado hace diez años, ella no habría reaccionado igual.
Ante estos dichos, Mirna fue enfática en señalar: “Nicolás ¿sabes cuál es la diferencia entre tú y yo? La diferencia es que yo sí he sido víctima. Yo acepto las disculpas del caballero, pero no es suficiente porque creo que una autoridad pública tiene doble o triple responsabilidad“.
En ese sentido, indicó que por lo mismo las mujeres tienen “la piel fina, porque nos ha pasado mucho“. Mirna agregó que entendía a lo que se refería Larraín, que ella tampoco estaba de acuerdo con que “linchen” al concejal, pero sí entiende que este debate es necesario.
Dicho eso, intervino Pérez diciéndole a Mirna que “yo también he sufrido pero no estoy dispuesta a funar a nadie“, pues no se conseguía nada con agresividad.
Schindler le contestó rápidamente que ella no avala la violencia ni mucho menos, pero que la condena es distinta según de donde provenga, sobre todo si se uno se pone en el lugar de quien sufre la violencia que implican este tipo de situaciones.
“Él pertenece a una generación donde ese tipo de cosas se validaban“, algo que también molestó a Mónica, quien sacó a colación a su padre que probablemente pertenecía a esa misma generación pero que no se expresaba así porque ha ido aprendiendo. En ese sentido, agregó que era más importante un proceso de diálogo que de agresión.
Pero la discusión no paró ahí, pues Larraín arremetió diciéndole a Mirna que no podía meter a todos los hombres al mismo saco y que ella no sabía si él u otros hombres han sufrido lo mismo.
Mirna agregó: “Tú dices que hay como una especie de vehemencia en la forma que uno lo expresa, y lo hace probablemente de un lugar donde estamos hasta más arriba de la coronilla de este tipo de cosas. No es tan simple como que ‘ups, una más’, no, es que son demasiadas más“.
Asimismo, agregó que un ejemplo claro de esa violencia son los grupos de WhatsApp de hombres en los que se comparte contenido machista y misógino, a lo que tanto Larraín como Polo Ramírez reaccionaron incómodos diciendo que no era justo meterlos a todos en el mismo saco.
Finalmente, la conversación sobre el tema continuó pero sin llegar a mayores acuerdos al menos entre Schindler y Larraín, quienes se mantuvieron firmes en sus posiciones frente a la polémica.
Fuente: BioBioChile.cl