El Gobierno anunció una rebaja de hasta un 40% de las tasas de embarque nacionales de aquí a 2020 y una disminución en la tasa internacional de hasta 6 dólares, en igual plazo.
Desde las aerolíneas celebraron la medida, mientras que el gremio de los buses manifestó su rechazo, acusando competencia desleal.
El tema era una petición de la industria aérea que venía hace varios años y el Gobierno respondió este miércoles por medio del ministro de Economía, José Ramón Valente, quien hizo este anuncio de una rebaja de 20% en la tasa nacional este año, un 10% en 2019 y otro 10% en 2020.
Mientras, la tasa de embarque internacional se reducirá de los 30 dólares actuales a 26 este año y 24 dólares en 2020. Algo calificado por el ejecutivo como un beneficio directo al bolsillo de las personas.
Todo se podría concretar en el mes de septiembre si Contraloría toma razón del decreto que será enviado la próxima semana. El descuento en los pasajes podría existir ya para las vacaciones de verano.
Pero nada sale gratis, de 30 a 50 millones de dólares anuales costará esto al Fisco, pero el ministro Valente dijo que el plan viene a arreglar una anomalía que existía.
“La mayor parte de los chilenos anhelaba viajar, y ahora la mayor parte podrá viajar”, señaló Valente y aclaró que el chileno no sólo viaja por turismo, sino también por negocios y otras necesidades.
Destacó el traslado aéreo como una herramienta de emprendimiento y descentralización desde las regiones. De los 9 millones de pasajeros que viajaban en 2007, la cifra se triplicó en diez años.
La tasa de embarque nacional a los principales destinos del país tiene un costo poco mayor a 7.500 pesos, este año podría bajar unos 1.500 pesos.
Según cifras entregadas por el Gobierno, la tasa de embarque puede significar en promedio un tercio de un pasaje. Desde el sector privado señalan que este impuesto es a la fecha el tercero más caro del mundo.
Aerolíneas y el gremio de los buses
El gerente general de Sky, Holger Paullmann, señaló que por primera vez la autoridad escucha a los clientes.
“Lo intentamos con el gobierno pasado, tuvimos muy buena recepción con algunas autoridades pero el ministerio de Hacienda fue en esa oportunidad el que lo paró en seco”, afirmó.
Mientras que el gerente general de JetSmart, Estuardo Ortiz, indicó que la medida del ejecutivo va a tener un impacto positivo.
“Al bajar los precios va a existir una estimulación del mercado, va a haber más clientes, más pasajeros, más personas viajando en avión. La realidad lo ha demostrado claramente, el mercado ha crecido más de un 20%”, agregó.
Desde la Asociación Chilena de Líneas Aéreas, valoraron la noticia, pero enfatizaron que los desafíos pendientes están en la infraestructura aeroportuaria y en los traslados ciudad–aeropuerto, y que también significan un costo relevante para los pasajeros.
Algo que compartió el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Manuel Melero.
“Será importante que las autoridades consideren estos factores, y tomen o adopten las medidas desde ya para la ampliación o mejoramiento de la capacidad o infraestructura aeroportuaria, para dar así una buena cabida a los turistas o las personas que se desplazan en o hacia nuestro país”, enfatizó.
Desde la concesionaria del Aeropuerto Internacional de Santiago se valoró esta medida y dijeron estar preparados ante la eventual llegada de nuevas aerolíneas y de más pasajeros, considerando los trabajos de expansión del terminal aéreo que se realizan.
“No es misterio que el aeropuerto está en su límite, tenemos una capacidad de 16 millones de pasajeros y hoy recibimos a 21 punto 4. En menos de 6 o 7 meses vamos a tener más que el doble en la capacidad actual en puertas de embarque”, dijo el subgerente de comunicaciones, Branko Karlezi.
Pero el sector del transporte rural e interurbano, agrupado en Fenabus, manifestó su total rechazo a las rebajas anunciadas y acusaron que el Gobierno fomenta la competencia desleal.
El presidente del gremio, Marcos Carter, advirtió que va a haber un impacto en los puestos de trabajo y en la continuidad de empresas.
“Por un lado el Gobierno dice que no haya cesantía y con esto van a dejar a muchas familias sin pega. El quiebre de empresas va a haber y aquí va a venir el problema de que las empresas pequeñas que hay en regiones a lo mejor van a ser invadidas por las grandes y ahí imagínese lo que va a pasar”, advirtió.
El líder gremial vislumbró su preocupación por el futuro de las empresas de buses. Aseguró que bajará la demanda, situación que podría desencadenar una crisis en algunas líneas e incluso la quiebra y, en consecuencia, un alza en el desempleo.
Preocupación que manifestaron también los funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil, ya que gran parte de su presupuesto -aseguran- proviene de las tasas de embarque.
El presidente de los trabajadores de la DGAC, José Pérez, dijo que esperan que esto no tenga efectos laborales en el servicio que cumplen.
“No hay que confundir (la medida) con poner en riesgo la seguridad para todos los ciudadanos de este país”, manifestó en alusión a la importancia del rol que cumple la DGAC.
Los fectos del anuncio de rebajas en las tasas de embarque se notaron también en la Bolsa de Comercio de Santiago, que cerró al alza, empujada por las acciones de Latam que subieron un 3,63%.
Fuente: BioBioChile