Además de divertirse mientras juegan, los niños y niñas fomentan a través de esta actividad su desarrollo físico, intelectual, social, afectivo y su creatividad. Sin esta experiencia, es imposible que se desarrollen plenamente. No sólo porque les da alegría, sino porque les permite generar relaciones positivas con su entorno, ya sea con su propia familia o con personas de su edad.
En el marco de la celebración del Día del Niño, Aldeas Infantiles SOS lanzó su campaña “Queremos niños haciendo cosas de niños”, buscan generar conciencia sobre la importancia del Derecho a jugar para desarrollar una niñez plena y feliz.
Dentro de este contexto, la Convención de los Derechos del Niño ratificó en 1990 la importancia del juego para el desarrollo de la infancia. Según esta declaración internacional, los niños y niñas tienen derecho a descansar, a jugar y a participar de actividades recreativas propias de su edad.
Denisse Castillo, psicóloga de Aldeas Infantiles SOS, explica que el juego es fundamental para lograr un desarrollo saludable e integral de los niños y niñas “esta es una de las principales actividades que realizan durante la etapa infantil que les permite comprender y relacionarse con su entorno y a su vez, desarrollan su imaginación, capacidad creativa, exteriorizan sus pensamientos, descargan sus emociones, interpretan la realidad, resuelven conflictos, entre otras cosas. Todo eso, mientras se divierten”.
Cabe señalar que el juego es fundamental en la recuperación de niños y niñas víctimas de algún tipo de vulneración. La psicóloga de Aldeas infantiles SOS señala que jugar es un tipo de terapia “les otorga una forma de expresar su mundo interno constituyéndose en un eje fundamental para su recuperación. Además, les permite generar confianza y los más importante, dejar de sentir miedo. Con esto los ayudamos a volver a ser niños, reír y soñar con un mejor mañana.
El jugar en familia es la mejor forma que padres e hijos se conozcan, pero para que sea una grata experiencia es indispensable que la familia disponga de espacios favorables y seguros como también, considerar las diferentes etapas, distintos tipos de juegos y su complejidad.
A continuación, le dejamos algunos tips:
De 0 a 2 años:
Para un bebé, a través de sus sentidos, comienzan a descubrir y explorar el mundo. Para esta etapa es bueno utilizar juguetes que hagan ruido, que tengan luces o distintas texturas para que pueda tocarlas de manera que fomenten y enriquezcan sus capacidades sensoriomotoras. La estimulación temprana requiere del contacto e interacción con la familia y su entorno para propiciar vínculos afectivos.
Adivinar los colores (2 – 5 años)
Este juego es muy útil cuando salen con los niños, ya que a través de él pueden mantenerlos entretenidos y potenciar el aprendizaje de los colores y las relaciones entre las cosas. Para empezar, deberán escoger un color básico y pedirles que digan todos los objetos que vean con ese tono. Esta actividad ayuda a desarrollar la memoria y el vocabulario.
Puedes cambiarlo (3 – 8 años)
En esta etapa es bueno potenciar el pensamiento lógico. Para esto deben decir frases simples, para que los niños decidan si ese acto u objeto se pueden cambiar. Por ejemplo “el color de los ojos” (no se puede cambiar); “las plantas de un jardín” (sí se pueden cambiar).
Otra idea, puede ser hacerles preguntas para que ellos decidan si son correctas o no. Por ejemplo: “¿Carlos puede nadar en invierno?” La idea es que responda usando su propia lógica y conocimiento del mundo. No hay respuestas buenas o malas, pero sí dejar que desarrolle su punto de vista usando su creatividad.
A partir de los 9 años:
Los padres se convierten en auténticos compañeros de juego, ya no es necesario ser tan educativos, lo más importante son las ganas de divertirse en familia a través de competencias, juegos de mesa o al aire libre. La recomendación es privilegiar aquellos juegos que requieran algún esfuerzo físico y gasto de energía. La idea es asociar el ejercicio a una activad entretenida donde sus padres participan. Este tipo de juegos podría evitar que en el futuro sean adultos sedentarios.
¿Hasta cuándo jugar?
¡Siempre! Cada etapa de los niños y niñas requiere de distintas motivaciones. A medida que los hijos vayan creciendo, es necesario encontrar pasatiempos que disfruten juntos. La idea es encontrar espacios para compartir en familia.
Sin embargo, hoy hay niños, niñas y adolescentes que no pueden tener este privilegio, porque fueron separados de sus familias. Por eso, necesitan ayuda para poder revincularlos con sus padres o parientes cercanos. Durante el 31 de julio al 06 de agosto, Aldeas Infantiles SOS lanzará su Campaña del Día del Niño.