El proyecto que podría exigir a los empleadores autorizar el “teletrabajo” en caso de contratar a padres, madres y cuidadores, podría traer más ventajas que desventajas, no sólo para los trabajadores sino también para las organizaciones.
La Comisión del Trabajo del Senado está buscando ofrecer mayor flexibilidad horaria y jornadas híbridas a padres y madres de menores de 14 años; y a cuidadores de personas con dependencia severa o moderada. En ese contexto, propone que no sea el trabajador quien solicite trabajar en la modalidad de teletrabajo, sino la organización en la cual se desempeña.
De aprobarse la ley, contar con esta opción que muchas empresas adoptaron durante la pandemia, representaría una disminución tanto en los gastos asociados al cuidado de menores u otras personas dependientes como en movilización. En este ámbito, el director de Adactiva, Cristian Montero, comenta que un gran número de colaboradores, efectivamente, pueden trabajar a distancia (coma) aunque reconoce el temor existente de cara a la futura obligatoriedad.
“En algunos casos, incluso vimos bastantes mejoras en la eficiencia. La productividad puede aumentar con el teletrabajo porque la gente ahorra tiempo en traslados que, a veces, pueden tomar más de una hora. Sin embargo, todavía nos queda aprender como empresas. Aunque entre nuestros propios clientes hemos visto el ánimo de avanzar en este camino”, detalla el especialista tributario y contable.
Según el contador auditor, otra de las ventajas asociadas a esta nueva modalidad es que se amplía la oferta de profesionales disponibles para ejercer diversas funciones. “La idea es poder acceder a los mejores profesionales, en lugar, de descartarlos porque no pueden asistir a la oficina de lunes a viernes durante 40 o 45 horas a la semana”, sostiene el director de Adactiva que ve con buenos ojos la iniciativa legal.
Otra virtud del proyecto sería el ahorro de costos para las empresas, en infraestructura, en el pago de cuentas básicas y otros asociados a la operación en una oficina. Y aunque algunas cosas pueden resultar un poco más complejas, como fortalecer el sentido de pertenencia de quien trabaja a distancia, Cristian Montero, cree que es posible trabajar en ello para que no frene la productividad.
“Si la norma se aprueba, los empresarios podemos mirar el vaso medio y sacarle partido a los beneficios que representa tanto para el trabajador como para la organización”, concluye el contador auditor.