La cinta, que se encuentra en cartelera en cines nacionales, fue incluso comparada por la revista Rolling Stones como “una versión libre de Billy Elliot” al contar la historia de Naur, un niño que sueña con ser cantante lírico.
Aunque muchos no se dan cuenta, la música acaba impactando la vida de las personas e incluso, pueden cambiarlas para siempre. Esa es una de las ideas que Yohan Manca quiso llevar a La Traviata, mis hermanos y yo.
La película se centra en Nour, un niño de 14 años que acaba de salir de vacaciones y debe realizar diferentes trabajos de servicio comunitario para ayudar a sus cuatro hermanos mayores a mantener los gastos del hogar que incluyen los cuidados a su madre enferma.
Específicamente, la mujer se encuentra en coma y sus hijos están convencidos de tenerla en casa para que no se aleje de ellos, es por esto que se turnan para cuidarla y el propio Nour acostumbra a reproducir diferentes piezas de ópera a su madre.
Sin embargo, un día, mientras pinta el pasillo de su escuela, se da cuenta que existe un curso de música lírica manejado por Sarah, quien, al descubrirlo espiando, le invita a formar parte.