Estos meses de pandemia ha provocado cambios en las rutinas de todos, y los niños han estado expuesto a un proceso de cambios importantes, el cierre de los colegios, el no poder compartir con sus pares, el cierre de parques y lugares de esparcimiento.
Todos estos aspectos generan confusión en nuestros niños, que se requiere de un adulto que los pueda guiar y orientar a esta nueva realidad, lejos de la sociedad que estaban ya acostumbrados y que era su vida anteriormente.
Los comportamientos esperables, puede ser el miedo, la angustia, la irritabilidad, la ira, la falta de concentración y el insomnio, entre otros. Las cuales si no se consideran y tratadas oportunamente pueden generar dificultades al igual como le ocurre a un adulto.
El Seremi de Salud, Bastian Hermosilla, señaló “Es importante entender que ante situaciones de crisis lo primero es mantener la calma, somos los adultos quienes debemos guiar el proceso de enfrentamiento adecuado de los niños, para que esta experiencia resulte lo más positiva posible, para ellos, y sin repercusiones en su futura salud mental”.
Es importante que se pueda mantener a los niños cerca de sus padres, mantener el contacto permanente, el aislamiento ha llevado al distanciamiento de abuelos, tíos, primos y amigos, pero existen nuevas formas de mantener los lazos, utilizando la tecnología, realizar videollamadas, siempre en compañía de un adulto, esto ayuda a los menores a enfrentar estos momentos de crisis.
Finalmente, es importante “mantener las rutinas familiares”, si bien al estar encerrados cambió la rutina familiar es importante lograr diferenciar entre los días de semana y fines de semana, realizar valorar las pequeñas cosas y convertirlas en nuevas ritos familiares, actividades como cocinar en conjunto, juegos de mesa, leer cuentos, ver películas entregaran herramientas no solo para poder enfrentar esta pandemia sino que fortalecerá positivamente los vínculos familiares y junto con ello brindará seguridad a los más pequeños del hogar en medio de tanta incertidumbre.