La cualidad y el contexto de los homicidios en Chile ha mutado en forma pronunciada durante los últimos años.
Si en 2017 la tasa de homicidios era de 4,2 por cada 100 mil habitantes, en 2023 pasó a ser de 6,4. Un crecimiento que tiene una particularidad, pues según el reciente Informe de Crimen Organizado del Ministerio Público, corresponde al tipo de homicidio “que más alarma pública provoca”.
“Se trata del que se realiza en la vía pública con armas de fuego, del que implica cuerpos desmembrados, en el que hay múltiples disparos hacia adentro de casas, y es el que hemos congregado bajo la rúbrica de homicidio en contexto de crimen organizado”, destacan.
En ese contexto, la complejidad de los cuerpos hallados tras asesinatos ha complicado la labor de policías y fiscales, pero también de otra institución clave para la investigación: el Servicio Médico Legal.
La problemática del SML
Con las autopsias o exámenes post mortem a los cuerpos vinculados a homicidios, el servicio entrega antecedentes esenciales para la resolución de los casos. Un trabajo que se ha vuelto cada vez más complejo, y no por un aumento en la cantidad de procedimientos.
Según información obtenida por Ley de Transparencia, hasta septiembre de este año se contabilizaban 8.186 autopsias, una cifra que se mantendría en los márgenes de entre 9 mil y 13 mil al año (aprox.). No obstante, la cualidad de dichos exámenes ha cambiado.
En conversación con BBCL, la directora del SML, Marisol Prado, alertó que aunque no hay cambios notables en la cantidad de autopsias, “han aumentado en los últimos años el número de muertes violentas o el número de muertes por agresiones de terceros”.
En esa línea, sostuvo que dicha alza en la agresividad de los homicidios les ha complicado el trabajo, lo que ejemplificó con el uso de arma blanca.
“Las personas generalmente tenían un solo corte, o una puñalada, hoy nos enfrentamos a situaciones con mucha más agresividad y mayor número de puñaladas. Lo mismo pasa con las armas de fuego, si bien antes veíamos un impacto de bala, ahora vemos más”, señaló.
Consecuencias de la agresividad
Lo dicho por Prado concuerda con el Informe de Homicidios Consumados, que apuntó un notable crecimiento en la intervención de terceros, de un 5,1% en el primer semestre de 2023 a un 12,1% en el mismo periodo de 2024.
Pero dicho factor no es el de mayor crecimiento en el contexto de los homicidios. Según el informe, la categoría que apunta a hechos “en investigación” es la que sufrió una mayor subida, del 0,2% al 13,8%.
Esto podría tener estricta relación con el trabajo del SML, y en ese sentido, la directora del servicio explicó de qué forma ha aumentado el tiempo de realización de las autopsias y análisis tanatológicos.
“Hoy día las autopsias, por esta mayor agresividad, demoran más tiempo. Implican protocolos especiales que hemos tenido que hacer, desde protocolos de femicidio hasta protocolos especiales, para enfrentar este tipo de muertes de causas violentas”, aseguró.
“Y, por otro lado, eso aumenta el recurso humano que necesitamos y los insumos que necesitamos para poder dar cuenta de todas las exigencias que se solicitan hoy día desde la Fiscalía y el Ministerio Público”, agregó.
En simple, Prado afirmó que con la violencia ejercida en los homicidios, “dejan de ser autopsia simples y pasan a ser autopsias complejas”, por ello, se aumentan las necesidades del servicio.
Trabajo con Fiscalía
En este contexto, según dijo la directora, el SML integró una unidad especialista de casos complejos, con la cual buscan cumplir las exigencias del Ministerio Público.
“Hoy día los casos complejos exigen una acción de laboratorio, de ADN, de pericias anexas, de informes complementarios, que implican un tiempo más prolongado en la entrega de un informe del Servicio Médico Legal. Porque hay una exigencia mayor, porque hay una investigación que es mayor”, explicó.
No obstante, pese a que las peticiones se han hecho más complejas, la cantidad de autopsias solicitadas por Fiscalía no han variado sustancialmente -al menos- en los últimos cinco años. Oscilando entre 3.000 y 3.500 desde 2020 a 2023, y con 2.772 hasta el 25 de octubre de este año.
“Imputado desconocido”
Sobre el trabajo de los fiscales en el aumento de la violencia se refirió el exfiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias, quien en conversación con BBCL señaló que la principal complicación en relación con la demora investigativa, ha sido el “aumento del imputado desconocido”.
Este implica una “desvinculación entre el autor del homicidio y la víctima”, algo repetido en delitos del crimen organizado como el sicariato.
“El problema en ese caso es que los imputados son desconocidos y también la víctima puede ser desconocida, porque puede ser un sujeto que no tenga regularidad en el país, es decir, un ilegal. Ahí es doblemente dificultoso llegar al esclarecimiento del delito porque no hay ninguna hebra por la cual empezar“, señaló.
Ahora, sobre el trabajo con el SML, Arias planteó que puede haber una sobrecarga de trabajo en el servicio; sin embargo, destacó que “se pueden hacer excepciones en casos de que requiera urgencia”.
“El SML está sufriendo, al igual que todas las instituciones con estas olas criminales, una sobrecarga de trabajo, que hace que sean más lentos los peritajes”, agregó.
Así, el exfiscal concluyó que “el sistema chileno está obsoleto para investigar este tipo de criminalidad”, proponiendo un trabajo entre instituciones que sea “en línea y coordinado”, donde el SML cumpla un rol más protagónico.
“El SML debería trabajar estos casos, hacer ellos mismos la vinculación con casos que son parecidos, quién mejor que ellos pueden identificar el tipo de muerte, el tipo de corte, y así poder trabajar mejor con las policías”, cerró.
Sobrecarga laboral y futuro del SML
No es primera vez que se habla de sobrecarga laboral en el SML. Tras los incendios de febrero pasado en Valparaíso, hubo reclamos por parte de los trabajadores del servicio. Respecto a eso, la directora Prado refutó que están “haciendo una medición con respecto a la sobrecarga” para evaluar futuras acciones.
Además, aludió a que los problemas de sobrecarga son herencia de administraciones anteriores, afirmando que el servicio “ha estado durante muchos años atrás con una sensación de abandono por parte del Estado para sus funcionarios”.
Este año, el SML recibió el mayor aporte fiscal de los últimos cinco años, con un total de 60.072.675.000 pesos. Prado justificó el monto por la necesidad de cumplir con brechas periciales pospandemia, que buscaron no topara con el trabajo diario. Además, recalcó que “el Servicio Médico Legal es un servicio pequeño”, con “mil funcionarios para 16 regiones”.
La directora insistió en que están en un proceso de modernización, el que el año próximo alcanzará su punto culmine con el traslado a un nuevo edificio en el llamado barrio judicial de Santiago, por lo que los gastos deberán adecuarse a ello.
Aun así, la directora advirtió que son varias las regiones que han aumentado su demanda y complejidad más allá de la RM, no descartando del todo los problemas de sobrecarga.
Prado concluyó que seguirán trabajando con la asociación de funcionarios y la gestión institucional para lograr “hacer una presentación de presupuesto adecuado a la necesidad que como servicio tenemos”. Esto en un contexto que con el crimen organizado, su tarea se vuelve cada vez más compleja.
Fuente:BioBioChile.cl