Este 2024, el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural cuadriplicó los recursos para el financiamiento de proyectos dedicados al fortalecimiento, inversión y manejo de sitios, considerando más de 690 millones de pesos distribuidos en proyectos de los siete Sitios de Patrimonio Mundial.
En su séptima versión, el Programa Social Sitios de Patrimonio Mundial contó con una convocatoria histórica de proyectos de fortalecimiento, inversión, operación y manejo de sitios chilenos inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco, que este 2024 destinará más de 690 millones de pesos, a diez proyectos que se entregaron a organizaciones administradoras o gestoras de Sitios de Patrimonio Mundial, distribuidas en siete regiones del país.
Este subsidio del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, creado el 2018, constituye el único financiamiento exclusivo para estos bienes que poseen un valor universal excepcional para la humanidad.
“Los recursos que se entregarán en 2024 prácticamente cuadriplican los fondos asignados en 2023 para el desarrollo y cuidado de los sitios, reforzando el compromiso por el Estado en el cumplimiento de la Convención de Patrimonio Mundial, Cultural y Natural de la Unesco de 1972, ratificada por Chile en 1980”, explicó la directora subrogante del Servicio Nacional del Patrimonio cultural en Atacama, Marcela Oviedo Sepúlveda.
Este financiamiento considera un enfoque de derechos que busca promover acciones concretas de igualdad e inclusión de las mujeres, que en esta ocasión lideran un 67% de las iniciativas y que corresponde al 53% de la conformación de los equipos de trabajo en los proyectos beneficiados.
ATACAMA
“Diagnóstico Participativo y Propuesta de Conservación Integral Finca Chañaral, Qhapaq Ñan, Sistema Vial Andino”, es el nombre de la iniciativa que recibirá el financiamiento en la región por un total de $25 millones de pesos, los que están destinados a su cuidado por parte de la organización administradora de este sitio de patrimonio mundial.
“Es una excelente noticia este aporte que realizaremos a la organización administradora de este sitio de patrimonio mundial en nuestra región, pues se suma a diversas iniciativas que buscan visibilizarlo, ponerlo en valor, y educar a la comunidad para fortalecer su protección, como lo es el caso del reciente lanzamiento del libro – Los Inkas y su Camino en El Salvador” de los autores Carmen Castells Schencke y Carlos González Godoy, y su publicación por parte de Codelco”, explicó Marcela Oviedo.
El Sistema Vial Andino, Qhapaq Ñan, inscrito en 2014 como parte del Patrimonio Mundial de la Unesco por Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú, es una pequeña parte de la vasta red vial que cubrió unos 30.000 kilómetros en su época de máxima expansión, y que en Chile se conoce tradicionalmente como “Camino del Inca”.
Lo declarado como Patrimonio Mundial son 616 km de caminos y 308 sitios arqueológicos, de los cuales Chile aporta con 112 km y 138 sitios. Este sistema vial fue construido a lo largo de varios siglos por los Incas, en base a senderos y caminos de distintas culturas, que fueron mejorados para facilitar las comunicaciones, los transportes y el comercio, y también con fines defensivos. Este extraordinario sistema de caminos se extiende desde las cumbres nevadas de los Andes, a más de 6.000 metros de altitud, hasta la costa del Pacífico, y muchos tramos aún están en uso por distintas comunidades.