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El mayor problema es la pérdida de datos: ¿Cómo proteger mi teléfono en caso de que sea robado?

Cuando un teléfono es robado, además de la pérdida del dispositivo, los datos sensibles almacenados son un gran riesgo. Acá te contamos cómo protegerlo.

Ha pasado poco más de un año desde la promulgación de la normativa que permite el bloqueo de un teléfono en caso de que sea robado, para disuadir su venta. Esto, mandatado por la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) y la Subsecretaría de Prevención del Delito en enero de 2023.

Según el primer reporte entregado por ambas instituciones, en el primer semestre del año pasado se registraron aproximadamente 72 mil teléfonos bloqueados tras haber sido sustraídos. Asimismo, las empresas de telecomunicaciones están obligadas a bloquear los dispositivos móviles robados a grandes proveedores, desde bodegas, camiones de transporte y empresas retail.

Lo anterior responde a una problemática relacionada con uno de los mayores temores de las personas que invierten en un celular. Cuando se es víctima de un robo, no sólo se trata de quedarse sin el dispositivo, sino que también abarca la pérdida de contactos, fotos, notas y productos bancarios o datos sensibles.

“Cuando nos roban el teléfono, el mayor problema es la pérdida de información y el riesgo de que alguien pueda utilizar o filtrar nuestros datos personales. Por eso, lo más importante es tomar medidas preventivas que brinden protección al usuario”, comentó Felipe Gómez, gerente de Terminales de Claro Chile.

¿Cómo proteger mi teléfono en caso de que sea robado?

Gómez entrega las siguientes recomendaciones:

● Usar contraseña: desbloquear con un patrón o password es lo básico (nunca deben ser números continuos). Las últimas generaciones de smartphones incluso contemplan verificación biométrica, con lector de huellas dactilares o escáner del iris, ofreciendo un buen equilibrio entre privacidad, seguridad y comodidad.

● Respaldar el IMEI: el International Mobile Equipment Identity es un número único que identifica a cada dispositivo y sirve para que el operador pueda bloquearlo de manera remota. Se obtiene digitando #*06# en el teléfono, aunque también está presente en la caja del teléfono. Se recomienda guardar este código.

● Usar apps de rastreo: tanto iOS como Android cuentan con la posibilidad de usar aplicaciones para rastrear el dispositivo, bloquear o borrar información a distancia. Para que estén operativas deben estar activadas y con el celular encendido. Es fundamental saber y eventualmente practicar qué haría si pierde o le roban su celular. Quién puede ayudarle a ver dónde está su celular y que pueda bloquearlo en forma remota.

● Aprovechar las dobles verificaciones de seguridad: En aplicaciones como WhatsApp, de mail o incluso Instagram resulta indispensable contar con un doble factor de autenticación para Whatsapp. Esto es fundamental, porque de esa manera, aunque caiga en un fraude y los delincuentes obtengan control de sus aplicaciones, no podrán instalarlas en otro teléfono.

● Mantener un registro de tus datos personales: Es importante mantener un registro seguro de tus datos personales, como números de cuenta, contraseñas y otra información sensible que puedas haber almacenado en tu dispositivo. Esto facilitará la protección de tu identidad en caso de robo. Es posible sincronizar el dispositivo con algún sistema que lo respalde regularmente en la nube. De este modo, se pueden recuperar datos guardados en su celular, como documentos, fotos y videos. No se recomienda guardar contraseñas o datos bancarios.

● Desactivar notificaciones en pantalla bloqueada: De este modo, la persona que tenga el teléfono robado no podrá responder mensajes de redes sociales o acceder a coordenadas de tarjetas que se envíen vía SMS.

● Encriptar los datos: algunos smartphones permiten crear carpetas encriptadas dentro del teléfono directamente desde su configuración de seguridad, lo que mejora aún más la información del usuario. Como alternativa, también existen aplicaciones que realizan la función de encriptado.

“Muchas veces los usuarios permiten que el teléfono almacene datos sensibles, como contraseñas a sus cuentas bancarias o tarjetas de crédito en sitios de compra, por un tema de comodidad. Esto se debe evitar a toda costa, porque es lo primero que buscará la persona que robe el celular, lo que puede llevar a pérdidas”, añadió Gómez.

Fuente: BioBioChile.cl

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