En lo que va del año, cuatro de las nueve localidades que atiende la empresa sanitaria no han sido afectadas por discontinuidad del suministro de agua potable por emergencia.
Con la aplicación de alta tecnología e ingeniera aplicada, la empresa sanitaria de la región, Nueva Atacama, ha logrado disminuir las roturas de matrices y con ello las interrupciones de suministro para los más de 95 mil clientes que tiene atiende.
Es así como se logró una disminución de un 17 por ciento en lo que va desde este 2021, comparado con el mismo periodo del año anterior. “Tenemos una buena noticia en el acumulado ya que tenemos una reducción importante (…) enfocado en la mayor zona donde se generan las roturas de matrices que son en la ciudad de Copiapó y Tierra Amarilla”, informó Francisco Celis, Jefe del Departamento Zonal de Nueva Atacama.
La disminución en estas emergencias se refleja desde la llegada de Nueva Atacama en el 2018 a la zona, teniendo resultados de una mejora en el 60% en comparación entre los años 2019 y 2020, lo que al día de hoy mantiene a las localidades de Vallenar, Diego de Almagro, El Salado e Inca de Oro sin discontinuidades de servicio en el 2021.
El profesional explicó que la razón por la cual se ha disminuido las cifras, son debido a la fuerte inversión en el cambio de matrices que ya han cumplido su vida útil o que han presentado continuas fallas, esto gracias a un análisis detallado lo cual permite focalizar las inversiones en aquellos puntos donde más se necesitan.
“Con un proceso de mejora completo, no tan solo es renovar la matriz, sino que determinar cuál es el origen de esta falla y posteriormente hacer la renovación del conjunto de elementos que nos pudieran estar provocando la falla”, acotó el Jefe Zonal de Nueva Atacama.
Cabe señalar que durante este 2021, se proyecta cambiar 4.000 metros de matrices, donde por ejemplo el cambio del material de tuberías de asbesto o PVC, son reemplazadas por un material de alta densidad (HDP) el cual se termo fusiona para que ante movimientos sísmicos disminuyan los riesgos de fisuras, y con ello la perdida de agua.
Nueva Atacama informó que mantendrá los distintos planes que está ejecutando, además de la incorporación de tecnología de monitoreo, con esto seguir disminuyendo la tasa de interrupciones de servicio. Todas estas acciones están enlazadas con las acciones para mejorar el servicio, lo que incluyó dar solución en primera instancia a la calidad del agua con una inversión que superó los $28.000 millones, y que mantiene cumplimiento normativo en toda la región.