El pasado 19 de septiembre Matías Zaldivia salió de su casa rumbo al estadio Monumental para cumplir con un nuevo entrenamiento en Colo Colo, club al que llegó el 21 de enero 2016 y donde se ha ganado el respeto de todos: desde utileros a sus propios compañeros.
Con un perfil bajo, y a base de esfuerzo y determinación, el defensor se fue ganando su espacio hasta transformarse en uno de los referentes del plantel. A tal punto, que fue escogido como uno de los encargados de negociar a nombre del equipo con la dirigencia cuando era necesario.
Sin embargo, pese a su estatus de indispensable y al cariño que siempre ha asegurado tener por la institución que le abrió las puertas en Chile, el zaguero se sintió en la obligación de presentar una denuncia pública contra la plana directiva.
Precisamente el día de septiembre ya mencionado, Zaldivia se esforzó tanto en la práctica que acabó con el tendón de aquiles roto. El ‘Mati’ fue trasladado hasta la Clínica Meds y fue operado.
Pocas hora después un llamado lo dejó ‘helado’: desde la dirigencia le informaron que Colo Colo no se haría cargo ni de la recuperación ni de su salario por los seis meses estimados de su proceso. Todo sería realizado bajo el sistema isapre.
“Matías está triste, desilusionado. No puede creer lo que le están haciendo. Tiene un contrato firmado y Colo Colo debe pagarlo”, lamentó el representante del futbolista, Matías Mayo.
“La guerra declarada”
Como se podía presagiar la situación llegó rápidamente a oídos del plantel, que no perdonó el desplante a uno de sus miembros.
La furia del primer equipo se hizo notar. Un jugador, que no quiso dar su nombre, aseguró a El Mercurio que “la guerra está declarada”, recordando también el episodio en que, en medio del estallido social, “nos mandaron al seguro de cesantía”.
“Lo de Zaldivia es solamente económico. Se ahorrarán 18 millones por seis meses. 108 millones en total. Ese es el fondo del asunto”, complementó.
Uno de los que dio la cara, al menos a través de Redes Sociales, fue Juan Manuel Insaurralde, compañero de zaga de Matías. El ‘Chaco’ subió una imagen junto a Zaldivia, Carmona y dos excompañeros, Jorge Valdivia y Agustín Orión, con un mensaje breve, irónico y contundente: “¡Éramos tan felices!… Hermano, estamos con vos @MatiZaldivia”,
Otro referente del ‘Cacique’, Claudio Borghi, exitoso exentrenador, afirmó en su vitrina televisiva que “el tema es dejar a un patrimonio en el club botado, y al tipo que se puso muchas veces la jineta. Más allá de ser capitán, es un jugador que representa al club y lo hace de muy buena forma. No es la forma de tratar a un jugador de fútbol”.
“Como decíamos antiguamente, a veces el plantel tiene que ponerse las pelotas, porque no pueden dejar que sigan pisoteando, primero a Morales y luego a Matías”, agregó.
Exjugadores como Jorge Valdivia y el Sindicato de Futbolistas Profesionales también reaccionaron furiosos a la decisión dirigencial y abogaron por un mejor trato a Zaldivia.
Gustavo Quinteros: un DT ‘en llamas’
Uno de los más molestos e incómodos por el caos que produjo la determinación fue el director técnico Gustavo Quinteros.
El estratega, que asumió recién a principios de octubre, tuvo que pedir en televisión que se acabara la guerra entre plantel y dirigencia.
Lo hizo apenas terminado el duelo entre su equipo y Everton el pasado miércoles 28 de octubre. “Lo hablamos mucho, la única manera de salir de esto es estar todos juntos y unidos, mejorar el equipo y tratar de sacarlo de abajo… si siguen habiendo conflictos entre jugadores y dirigentes será difícil”, manifestó.
“Yo no sé bien el tema de las leyes pero espero que el club responda y que de una vez por todas le demos todos para adelante”, agregó.
El entrenador incluso avisó que se dedicaría a estudiar la legislación chilena: “No sé este tema de leyes, pero en estos días me voy a poner al tanto. Ya saben, los dirigentes y jugadores, hay que estar juntos y no tener más conflictos”.
“Espero que estos días los dirigentes puedan arreglarlo con el jugador y solucionar el problema”, remató.
Con el club en un desastroso momento deportivo -es penúltimo del torneo- y anímico por el ‘caso Zaldivia’, el presidente decidió salir a dar la cara en medio de la crisis.
Aníbal Mosa citó a una conferencia de manera urgente el pasado jueves, en la que terminó aceptando el error e invitó al plantel a acordar la paz. Obviamente, incluyendo dar pie atrás con Matías.
“Esto fue un error, estamos pagando las consecuencias, ahora tenemos que mirar hacia adelante”, aseveró Mosa frente a los medios, resaltando que “es un tema que llegó y se fraguó en la administración… entiendo que haya desconfianza, aquí lo importante es que no hay mala intención con el jugador”.
“Para mí siempre ha sido primero el jugador y se lo que ‘Mati’ significa para la institución”, acotó con preocupación por el quiebre que se produjo.
La máxima autoridad ‘alba’, además, hizo hincapié en que “decirle a todos, a los hinchas, les pido disculpas, asumo toda la responsabilidad, estoy seguro que esto lo vamos a dar vuelta… vamos a cambiar, voy a encabezar ese proceso. Les aseguro a los colocolinos que esto lo daremos vuelta”.
“La solución es estar unidos, desde el directorio, hoy hice ese planteamiento, vamos a dejar nuestras diferencias de lado. Tenemos que buscar la unidad con jugadores”, remató.
Mientras Mosa aseguró haber alcanzado la paz y llamó a mirar hacia futuro para salir de la mala posición deportiva, trascendió la ‘verdadera razón’ que habría cambiado el rumbo dirigencial en el Monumental: un posible problema de discriminación.
“Si la decisión era no seguir pagando la totalidad del sueldo de Zaldivia, correspondía hacer lo mismo con Marcos Bolados (se lesionó el miércoles) o con cualquier otro jugador que se lesionara… No podía ser uno sí y el otro no, porque además nos metíamos en un problema legal de discriminación”, reconocieron desde la directiva ‘alba’ a El Mercurio.
Sin ir más lejos, en ByN estaban al tanto que Bolados incluso amenazó con una posible demanda “si repetían el modelo utilizado con el argentino”.
Factores que, sin duda, terminaron repercutiendo en el cambio de postura. Ahora, Colo Colo busca la paz, mientras los hinchas rezan por una pronta mejora para escapar de la zona complicada de la tabla de posiciones.
Fuente: BioBioChile
