En la tierra natal del Papa Francisco la despenalización del aborto ha sido una lucha constante de las mujeres.
La lucha de las feministas y las campañas desde #NiUnaMenos a #MareaVerde han inspirado a varios otros movimientos de mujeres de América Latina y el mundo. Es por eso que el anuncio del proyecto de ley sobre la “Interrupción del Embarazo”, de Alberto Fernández, presidente de Argentina, fue recibido con gran júbilo, dentro y fuera del Congreso.
“Teníamos mucha expectativa por lo que iba a decir (el presidente). El no habló en sí de los detalles del proyecto, pero marcó el espíritu con el cual presentaría el proyecto”, dice a DW Jenny Durán, comunicadora social que forma parte de la “Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal Seguro y Gratuito”.
Dicha “Campaña Nacional” fue lanzada hace 15 años y viene trabajando sobre un proyecto de ley que ya se ha presentado ocho veces al Congreso. La organización reúne a más de 300 actores sociales que lucha por el “derecho a abortar sin condiciones”.
¿Se rechazará de nuevo?
Es la novena vez que se presentará una ley de legalización del aborto. Pero esta vez, el texto del proyecto está siendo redactado por el mismo poder ejecutivo. En 2018, el presidente de ese entonces, Mauricio Macri, permitió el debate de la legalización del aborto, sin tomar postura abiertamente. El proyecto de 2018 se aprobó en el Congreso, pero fue rechazado en la última instancia en el Senado con 38 votos en contra, 31 a favor y 2 abstenciones.
“Hoy, el contexto y las circunstancias son inmejorables. Porque es el mismo presidente quien expresa, con mucha claridad, su voluntad de que esto avance en el Congreso”, dijo la ex diputada, Lucila Maria de Ponti. Pero tan fácil como parece no están las cosas.
El mismo presidente del bloque oficialista en el Senado, José Mayans, se opone radicalmente al proyecto. Tanto que ha afirmado que si se aprueba, “el Estado autorizaría a matar a una persona”. José Mayans es miembro del Partido Justicialista, del cual también es miembro Alberto Fernandez.
“Por supuesto que hay diputados que no están de acuerdo con el proyecto. Y van a manifestarse en contra. Pero confiamos en que todos los legisladores que están indecisos respalden al presidente. Por lo cual, creo que en esta ocasión nos encontramos con muchísimos mejores condiciones que la última vez.” dice la ex diputada.
Postura de Fernández genera rechazo entre otros opositores al aborto legal
“La militancia activa del presidente nos preocupa porque creemos que va a hacer todo lo posible para que esto salga. La presión sobre las provincias y los gobernadores de alguna manera puede afectar el voto de los senadores”, dijo, por su parte, a la agencia AFP Camila Duró, vocera del movimiento Frente Joven, quien enfatiza que “queremos alertar al poder político de que hay una mayoría en el país, que sale en las encuestas y sale a las calles, que no está de acuerdo con este proyecto de ley de descarte de argentinos”.
El Plan de los 1000 días
El presidente anunció que, en paralelo al proyecto de la legalización del aborto, se votará en el Congreso lo que se denomina como El Plan de los 1000 Días.
Es un plan integral que ayudará a las personas que quieren ser madres pero por razones de vulnerabilidad social y económica, tienen dificultades. “Obviamente cualquier modalidad de inclusión y de beneficio para quien quiera continuar un embarazo será bienvenido. Porque nosotras estamos a favor de la libertad reproductiva. A favor de que la persona tenga las condiciones necesarias, tanto para continuar un embarazo o cómo no hacerlo.” dice Durán de la Campaña Nacional.
Impacto regional
En América Latina, solamente en Cuba, Uruguay, Guayana, Guyana Francesa y Puerto Rico es legal abortar sin condiciones en las primeras semanas de gestación. El plazo cambia, según cada país. Mientras que en México, y solamente en Ciudad de México, se puede abortar sin condiciones hasta las primeras 12 semanas de gestación.
Católicas por el Derecho a Decidir es una organización latinoamericana con oficinas en 8 países. Su presidenta, María Teresa Bossio, es muy entusiasta sobre el impacto regional que puede generar si el proyecto se aprueba. “Vimos como la Marea Verde impactó la región. Cómo impactó a Chile”, dice Bossio refiriéndose a la legalización del aborto en 2017 por 3 causales: violación, riesgo para la vida de la madre e incapacidad del feto para sobrevivir fuera del útero, lo que médicas y juristas llaman inviabilidad fetal.
María Teresa Bossio, de Católicas por el Derecho a Decidir, concluye que “el pañuelo verde está presente en toda la región, y representa la soberanía de las mujeres sobre sus cuerpos”.