Tras divorciarse en 2019 de su esposa de 25 años, Jeff Bezos volvió a encontrar el amor en Lauren Sánchez, una presentadora de noticias y empresaria estadounidense.
Pese a que el hombre más rico del mundo ya cuenta con un multimillonario portafolio de propiedades dentro de Estados Unidos, ahora la pareja busca una nueva casa para poder vivir juntos.
The New York Post consignó que la idea del CEO de Amazon sería adquirir un inmueble en los exclusivos barrios de Beverly Hills o Bel Air, en Los Ángeles, sin que el precio sea un problema.
La primera idea fue Chartwell Estate, que apareció en los créditos de la serie Beverly Hillbillies.
Esa propiedad salió al mercado en 2017 por US$350 millones, pero finalmente un hijo de Rupert Murdoch, Lachlan, la adquirió en diciembre de 2019 por US$150 millones.
Aquella venta rompió todos los récords en California y se transformó en la transacción inmobiliaria más grande en su historia.
Dentro de las comodidades que incluía esta vivienda de 26 habitaciones había una piscina de 22 metros de largo, con una casa para huéspedes de cinco dormitorios, una bodega con 12 mil botellas de vino, jardines, un túnel subterráneo y vistas panorámicas tanto de Los Ángeles como del Océano Pacífico.
La misma publicación señaló que el multimillonario ahora tendría en la mira Casa Encantada, una casa de 3.716 metros cuadrados que aparte de cancha de tenis tiene una piscina privada.
Acá el valor sube a US$225 millones. De comprarla por este precio, se transformaría en la segunda venta más cuantiosa en la historia de Estados Unidos, luego de los US$239 millones que desembolsó Ken Griffin por una propiedad de cuatro pisos en Nueva York en 2019.
Según el portal Nest Seekers, el predio tiene una superficie total de 34 mil metros cuadrados, que la casa tiene 60 habitaciones y que esta vuelve al mercado tras 20 años.
La vivienda de influencia georgiana inglesa fue diseñada por el famoso arquitecto James E. Dolena y su interior fue realizado por el diseñador T. H. Robsjohn-Gibbings.
Erigida en 1937, en ese entonces tuvo un costo de US$2 millones, cerca de US$35 millones de hoy.