El senador PPD Guido Girardi solicitó este domingo la clausura de la Clínica Dávila al acusar -junto a tres denunciantes- que el centro de salud pidió dinero en efectivo como garantía antes de realizar ciertos procedimientos médicos de urgencia.
Según una de las denunciantes, Silvia Barcos, en agosto de este año, la clínica pidió dinero por adelantado para hospitalizar a su madre, a la que la debían internar tras pasar por urgencias.
De acuerdo a la mujer, sólo lograron hospitalizarla cuando el centro accedió a recibir 2 millones de pesos en vez de 3, y recibió los cuidados médicos correspondientes recién una vez que se transfirió el dinero.
En esa línea, Girardi anunció mediante un comunicado de prensa que pedirá a la Superintendencia de Salud que obligue a la clínica a devolver los montos exigidos, así como el término de registro del recinto asistencial.
“Las multas son irrisorias y deben tener un castigo ejemplificador”, aseveró el congresista. Asimismo, adelantó presentará un recurso de protección y acciones civiles contra el establecimiento.
“No aplica cobros anticipados”
Mediante un comunicado, la Clínica Dávila aseguró que respetan “a cabalidad la Ley de Urgencia y no aplica cobros anticipados a los pacientes que ingresan a través de ella”.
“En aquellos casos que no clasifican dentro de esta ley, la clínica aplica una modalidad de pago anticipado acorde a los reglamentos y regulaciones vigentes”, añadieron.
De todos modos, indicaron que “en cuanto a las denuncias realizadas por algunos usuarios, la institución se encuentra revisando los antecedentes de cada uno de los casos para asegurarse de que no existan irregularidades”.
