El próximo martes 2 de julio se vivirá una jornada histórica en nuestro país, gracias al esperado eclipse total de Sol.
La franja de totalidad de la sombra que dejará este fenómeno, alcanzando un 100% de oscuridad, pasará por la Región de Coquimbo, y se ubicará entre la localidad de Domeyko por el norte, en la Región de Atacama, y por Guanaqueros por el sur, en la Región de Coquimbo.
Cabe señalar que este eclipse total no solo podrá verse desde tierra, ya que además un grupo de afortunados podrá apreciarlo desde el aire en un avión, gracias a un concurso en conjunto entre Nat Geo y Samsung Galaxy S10.
De manera inédita, las personas que estarán a bordo disfrutarán de 10 segundos más del eclipse gracias a la trayectoria y velocidad que tendrá este durante los minutos que dure el fenómeno.
BioBioChile tuvo la oportunidad de conversar con Klaus Von Storch, quien en 2001 fue considerado como candidato a astronauta de la NASA y que piloteará el avión para ver el eclipse.
“Son dos aviones de Sky Airlines, uno de los cuales llevará una decena de cámaras en el costado izquierdo, en donde se verá el eclipse. En el fondo se hará un registro del evento y de cómo es la sensación dentro del avión”, explicó Von Storch, quien además integra la Comisión Científica y Tecnológica del Comité de Ministros para el Desarrollo Espacial.
“El segundo es un avión que se llama vuelo ciudadano, y que lleva a invitados de distinto tipo, entre ellos a los ganadores del concurso.Hay gente que nunca había volado, así que será muy bonito”, agregó.
“Vamos a despegar desde el aeropuerto Arturo Merino Benítez aproximadamente a las 15:25 horas. El vuelo tendrá una duración aproximada de dos horas y quince minutos, pero el eclipse, el momento de la umbra, de la oscuridad total, será de solo dos minutos y medio”, sostuvo.
Von Storch explicó que durante el vuelo se dirigirán hacia el sector oeste, “es decir hacia el mar. Nos adentraremos cerca de 300 km, y luego viraremos hacia la derecha, rumbo noreste, para tener el Sol exactamente al costado izquierdo, y ahí volaremos unos 400 km”.
“A las 16 horas con 39 minutos y 15 segundos llegaremos al punto exacto que es donde se inicia el momento del eclipse total. Nos vamos a encontrar a una altitud de 39.000 pies, y el otro avión estará a 38.000 pies”, puntualizó.
De acuerdo al piloto nacional, esto fue coordinado con la Dirección de Aeronáutica para tener las salidas aseguradas desde Santiago, en caso de que haya algún imprevisto.
“Tenemos planes de contingencia, hemos estado trabajando con gente de la NASA, como con Eduardo Bendek, ingeniero chileno que se dedica al tema astronómico. Últimamente hemos estado conversando casi a diario sobre cómo enfrentar cualquier tipo de contingencia, en el fondo para asegurarnos de tener la mejor vista posible de este evento”, aseveró.
¿Qué pueden esperar quienes observen el eclipse desde el aire? “En general, desde la altura, tienes varios aspectos que son favorables. Generalmente la atmósfera es menos densa, por lo tanto no hay partículas contaminantes”, precisó.
“Por otro lado, también tienes un campo visual más grande, porque en el fondo tú te alejas de la Tierra y vas viendo cómo se va acercando rápidamente lo que es la sombra que se va produciendo por el eclipse. Es como cuando vuelas durante el amanecer o el atardecer, se producen colores muy bonitos debido a que la atmósfera está más limpia, y tienes una visión bastante más lejana de la que podrías tener en tierra”, ahondó.
Cabe precisar que tanto Von Storch como el resto de los pilotos que participarán de estos dos vuelos, llevarán lentes especiales como medida de seguridad.
Acercando la astronomía a la gente
Para el destacado piloto nacional, en el último tiempo ha habido un cambio en la forma en que la gente percibe este tipo de temas. “Yo creo que el profesor José Maza ha hecho un tremendo trabajo porque con un lenguaje relativamente sencillo, ha entregado información de forma muy atractiva para la gente”, expresó.
“Debo recordar que Chile es un país que tiene una gran cantidad de telescopios, que aporta mucho a la astronomía a nivel mundial, y creo que era hora de que despertara este interés por la astronomía”, enfatizó.
Por su parte, Von Storch valoró el impacto que ha tenido el sector privado en la industria espacial, de la mano de empresas como SpaceX y Blue Origin.
“Es tremendamente reconfortante, porque esto nació de la riqueza que tienen algunas personas y de los sueños que han perseguido en sus vidas de querer ser un aporte, de investigar y viajar en el espacio”, comentó.
En el caso de Elon Musk, fundador de SpaceX y que pretende ir a Marte y a la Luna, Von Storch menciona que ha sido “bastante creativo en cómo reducir los costos, en cuanto a reutilizar los cohetes. Por lo tanto, está abriendo un campo tremendo y unas posibilidades para que Chile también en el futuro pueda participar”.
“Es importante que en nuestro país evolucione en ese sentido, que tengamos una agencia espacial. Tenemos una asociación que se llama ACHIDE (Asociacion Chilena Del Espacio), en la que un grupo de expertos estamos involucrados en materias espaciales, tanto legal como en la parte de ingeniería. Se creó un ministerio de ciencia y tecnología, el cual ojalá albergue o cree una agencia espacial para que nosotros como país también tengamos ese acceso”, aseveró.
“Tuve posibilidad de viajar con la NASA, después con los rusos, y siempre hubo temas que por un lado era administrativos, por la falta de una agencia espacial, que los procesos eran bastante lentos porque no había un conocimiento de cómo se ejecutan ciertos acuerdos en esa área. Cuando como país llevas un astronauta, además llevas un experimento científico
Respecto a la posibilidad de ver a un astronauta chileno, Von Storch -quien tuvo opciones de viajar con la NASA y con los rusos- fue claro: “El chileno va a tener más posibilidades en el futuro cercano, yo creo que en dos o tres años, cuando se masifique más el traslado de astronautas a través del sector privado”.
Fuente: BioBioChile