Cobertura, voz y datos, robustez y velocidad de despliegue son algunas de las ventajas que ofrece dicho servicio provisto por Tesacom.
Entendida como cualquier tipo de red con una alta capacidad para transportar información y que influye en la velocidad de transmisión de ésta, la banda ancha en general es considerada hoy un servicio esencial para las comunicaciones de las organizaciones y personas.
A los sistemas tradicionales como ADSL, Fibra Óptica y 4G que son, comúnmente, los más usados en las zonas urbanas, se suman también las soluciones satelitales (fijas y móviles) que son ideales para las zonas remotas o rurales.
En este sentido, Juan Pablo Pelizza, ingeniero de Pre Ventas de Tesacom, agrega que son varios los motivos que existen para preferir las soluciones satelitales que hoy están disponibles en el mercado, destacando entre otros los siguientes:
- Cobertura. Este servicio permite a los usuarios contar con una amplia cobertura para comunicarse y estar conectado con cualquier punto del planeta al operar con las constelaciones satelitales existentes.
- Velocidad de despliegue. Las soluciones tecnológicas que permiten disponer de banda ancha satelital se pueden instalar en un tiempo mucho menor que los sistemas tradicionales, como fibra óptica, ADSL, 4G, etc. “Dependiendo de la alternativa satelital elegida, una compañía puede disponer de este servicio en un plazo que va desde algunos minutos (terminales BGAN) hasta unas horas (antenas parabólicas), independientemente de si se está en el desierto, montaña o zona austral”, resalta Pelizza.
- Mínima inversión inicial. A la hora de comparar las alternativas que existen cuando se desea conectar un sitio remoto, el costo que demanda desplegar una solución satelital es siempre más económico versus a las convencionales (tendidos de telefonía, fibra óptica, radio enlaces, redes celulares, etc.).
- Robustez. La comunicación satelital cobra especial importancia a la hora de afrontar catástrofes naturales. “Aun si nos encontramos en plena ciudad, todos somos susceptibles a quedarnos incomunicados durante estas situaciones de emergencia”, comenta el ingeniero de Pre Ventas.
- Monitoreo, telemetría y telecontrol. Tener visibilidad de los procesos es fundamental a la hora de lograr mayor eficiencia. Hoy en día, gracias a la comunicación satelital, no sólo es posible dar enlaces tan pequeños como económicos para conectar sensores, sino que también es factible tener gestión remota de plantas mediante la banda ancha satelital.
- Ahorros. La implementación de sistemas de banda ancha satelital resulta, a la vez, mucho más económica que, por ejemplo, la puesta en marcha de soluciones ADSL en el ámbito rural, lo que permite generar grandes ahorros en el mediano y largo plazo.
- Escalabilidad. Al tratarse de sitios autónomos, es posible aumentar el tamaño de la red donde, a medida que crece la operación, se anexan sitios sin necesidad de alterar la estructura vigente. La banda ancha satelital posibilita tener una red privada amplia, atravesando grandes extensiones (o incluso fronteras) sin necesidad de instalar torres o enterrar kilómetros de frágil fibra óptica.
- Streaming. Dependiendo del sistema tecnológico usado, equipamiento y de la velocidad del plan contratado, la banda ancha satelital hace posible la distribución digital de contenido multimedia, ya sea por secuencias o de manera continua.
- Voz y datos. La banda ancha satelital posibilita a las empresas y personas navegar en Internet, sin importar el momento o lugar, y disfrutar de todos los beneficios que la gran red entrega en materia de contenidos y servicios en línea. Además de datos, la banda ancha satelital provee la posibilidad de comunicarse mediante llamadas de voz, ya sea a otros equipos satelitales o a teléfonos celulares y fijos convencionales. Considerada como una de las herramientas más utilizadas en las organizaciones en la actualidad, el e-mail es una de las aplicaciones que también puede operar con la banda ancha satelital, ya sea para intercambiar información relevante, realizar consultas y/o tomar decisiones.
