El Secretario Regional Ministerial de Desarrollo Social (Seremi), Raúl Martínez, se refirió al anuncio que hizo el Presidente Sebastián Piñera, respecto al Acuerdo Nacional por la Paz y el Desarrollo de la Araucanía, calificándolo como “una respuesta a un problema histórico, que trajo una serie de consecuencias negativas para la región”.
La autoridad detalló algunos de los principales ejes de este acuerdo, que implicó 11 visitas a las regiones de La Araucanía y Bío Bío y más de 100 encuentros liderados por el Ministro de Desarrollo Social, Alfredo Moreno, con autoridades, comunidades mapuches, representantes de la sociedad civil, gremios y víctimas de la violencia rural.
Según el seremi, algunas de las principales medidas que considera este acuerdo son el impulso de una reforma que reconozca constitucionalmente a los pueblos indígenas; poner urgencia al proyecto de ley que crea Ministerio de Pueblos Indígenas y el Consejo de Pueblos Indígenas; promover una ley de cuotas que establezca pisos de participación de candidatos indígenas para cargos de elección popular; potenciar entrega de tierras e iniciativas productivas; acelerar regularización de títulos de propiedad de tierras indígenas; ayuda a víctimas de violencia y terrorismo para recuperación y reemprendimiento; y la creación de un Consejo permanente por el Reencuentro en La Araucanía para hacer seguimiento de los avances del plan, entre otras medidas.
“Es un plan que está en el corazón de nuestras prioridades y cuyos tres principios fundadores son la voluntad de diálogo y de buscar acuerdos; el reconocimiento y valoración de nuestra diversidad cultural; y avanzar hacia el desarrollo integral, inclusivo y sustentable de la región”, declaró Raúl Martínez.
Parte de este Acuerdo Nacional es el Plan Impulso Araucanía, que contempla 491 proyectos cuyo objetivo es potenciar el desarrollo en la región que presenta los mayores índices de pobreza del país. La inversión pública contemplada para el período 2018-2026 es de US$8.043 millones, mientras que la inversión privada se estima en 16 mil millones de dólares.
Respecto a este proceso, el representante regional de la cartera de Desarrollo Social manifestó que “se ha abierto un clima de esperanza, porque lo que se vivía hace seis meses atrás era una desunión grande, muchos problemas de violencia y en la operación de la policía, poca claridad de cómo salir delante de manera conjunta para tener un desarrollo que pudiera enfrentar problemas de pobreza y los que viven las comunidades mapuches. Por eso el Acuerdo por la Paz en la Araucanía es una muestra de la voluntad de diálogo de este Gobierno”.
Además, remarcó que “se trabajó sobre lo que hizo la Comisión Vargas, que creó la Presidenta Bachelet, por que la intención no es destruir lo anterior, sino construir sobre eso. Además, queremos seguir trabajando con todas las personas de la región, de oposición, de gobierno, mapuches y no mapuches. Esto no se puede resolver sólo con la tarea del Gobierno, hay que hacerlo entre todos”.
En esta línea, la autoridad destacó el trabajo conjunto en la construcción de este plan, en el que además participaron los ministerios de Agricultura, Obras Públicas, Bienes Nacionales, Hacienda, Interior, Economía, Salud, Educación, Energía, Medioambiente, Vivienda y Urbanismo, además de Corfo.
“Sabemos que la tarea aún no termina, aún queda mucho por hacer, pero estamos convencidos de que estas son las formas y las instancias a través de las que se puede construir un país más inclusivo y con oportunidades para todos sus habitantes”, puntualizó el seremi Raúl Martínez.
