Las mujeres recibieron terapias alternativas, actividad enmarcada en la programación del área técnica regional de Gendarmería.
La agrupación de voluntarias Anamaya realizó reiki y terapias completarías a las privadas de libertad de la unidad penal de Copiapó, la actividad fue organizada por el área técnica de la Dirección Regional de Gendarmería y tuvo como finalidad que las mujeres puedan ampliar su conciencia y manejar sus emociones en una experiencia como es estar en la cárcel.
Al respecto Verónica Chinga voluntaria de Anamaya, señaló que “somos un grupo de 9 voluntarias que nos dedicamos a realizar voluntariado a personas que no pueden recibir contención emocional y que lo necesitan urgente. Nuestra misión es proporcionar ayuda para mejorar la calidad de vida de personas marginadas, conectándose desde la parte femenina con las privadas de libertad y entregarles nuestros conocimientos de sanación, que les serán muy útil en la situación por la que atraviesan”.
Asimismo Karen Narváez, asistente social de la Dirección Regional, indicó que este tipo de actividades se encuentran dentro de la parrilla programática que tiene el área técnica regional y que buscan ayudar a reinsertarse en la sociedad a las mujeres en este caso privadas de libertad.
Al finalizar la asistente social de Gendarmería agregó que “aportamos a los internas herramientas para facilitarles el tránsito hacia esa oportunidad que necesitan y que les entregan calma en el manejo y la comprensión de las emociones en una situación como es estar en la cárcel”.
