A principios de diciembre Juan Pablo Queraltó se fue de vacaciones junto a su esposa Francisca Sfeir. Lo que el público no esperaba es que el periodista no regresaría más a Bienvenidos ni a Canal 13. La estación decidió no renovarle contrato, por lo que el 31 de diciembre dejó de ser parte de la televisora.
Su salida, sin embargo, no fue una sorpresa para Queraltó ya que los últimos meses en el programa fueron muy difíciles para el comunicador, especialmente luego que Pablo Manríqueztuviese que renunciar tras la polémica por el caso de Nabila Rifo.
Manríquez había sido uno de los responsables de convencer al periodista de dejar Chilevisión (CHV) para unirse al 13, por lo que su partida fue un duro golpe para Juan Pablo. Las cosas que complicaron aún más cuando a finales de septiembre, Mauricio Correa asumió la dirección del programa.
Correa tenía una clara idea de lo que quería del espacio matinal, por lo que comenzó a potenciar más a los animadores y a Raquel Argandoña, además de rostros. “-Mauricio Correa- Instala a Los Desayunadores, con Nacho Pop y Matías Vega; integra al haitiano Evens al programa; su juego con la Raquel es mucho más grande y crece mucho más, porque se conocen. Y él también decide potenciar mucho más a los animadores y a algunos panelistas y otros no. Y está bien. Ante eso uno no le va a ir a criticar ‘oye, qué pasa, por qué no me potencias a mi’, si tal vez tampoco era su intención hacerlo”, reconoció el comunicador a Glamorama.
“A mi me gusta trabajar con gente con la que puedas tener la posibilidad de tener la oficina abierta; donde puedas conversar, ayudar, potenciar, trabajar en conjunto. Y cuando uno no está en esas condiciones, tienes que ser bien hombre, tener bien puestos los pantalones, e inteligente y decir ‘en este lugar ya no estoy siendo aceptado como antes, entonces prefiero dar un paso al costado’”, agregó.
Este escenario, hizo que Queraltó se diera cuenta que no quería repetir la historia de otros comunicadores que recibían un sueldo de un canal sin hacer ningún trabajo. “Para pasar un 2018 o 2019 mal, llegando a la casa y decirle a mi señora ‘pucha, hoy día no hablé nada… Tuve cinco horas y media y dije tres palabras’. ¿Eso es grato? No es grato para nadie. Es una frustración profesional, interna. Cuando uno empieza a vivir esas cosas, mejor chao. Yo en Chilevisión tuve los mejores años de mi vida, porque nací en ese canal y donde se me potenció siempre a punta del trabajo que yo hacía, no porque sí. Y es bueno porque creces como comunicador”, sentencio.
“Si uno fuese un gallo mediocre, te conformas con estar sentado cinco horas sin decir nada y a fin de mes recibir tu sueldo. Yo quería participar en las pautas, después las pautas dejaron de ser con los panelistas, entonces ya no me incluían en las pautas. Ante eso es mejor dar un paso al lado”, repitió.
Pero a pesar de todo lo vivido, el periodista dice estar agradecido con el canal que le abrió las puertas. “Yo di todo lo que pude. Entregué todo. Tú te diste cuenta de que pasaron mi matrimonio completo en la tele. Tengo que ser igual súper agradecido, porque Canal 13 como empresa se portó muy bien conmigo. En todos los programas que pudo ponerme el canal, me puso. Estuve en The Voice, en las elecciones de alcalde, en todas las cosas digitales que hizo el canal. Le animaba todos los eventos al canal, hasta los eventos del casino se los animaba”, agregó.
Un adiós sin despedida
A muchos les llamó la atención que Queraltó no se despidiera en pantalla, a pesar de la buena relación que mantenía con la mayoría del equipo. Sin embargo, según él explicó, fue una decisión suya no decir adiós en pantalla a principios de diciembre cuando se fue de vacaciones.
“Lo que pasa es que fui yo el que no se quiso despedir del programa. Porque yo sentía ‘por qué me voy a despedir si seguía ligado a Canal 13 hasta el 31 de diciembre’. Yo no me iba del canal hasta ese minuto. Se hablaba de la posibilidad de hacer otros espacios al interior de la misma empresa. Por eso no me quise despedir”, aseguró.
“¿Y por qué uno se va a andar despidiendo llorando? Si el mundo no se va a acabar porque te despiden de un programa. Fue distinto a cuando me fui de Chilevisión, porque fueron 10 años trabajando en la empresa. Yo firmé por dos años por Canal 13”, explicó.
Tras su salida, asegura que sus excompañeros lo apoyaron y se portaron muy bien con él, especialmente Tonka Tomicic, Martín Cárcamo y Polo Ramírez. “A todos les llamaba mucho la atención mi salida del matinal. La encontraron rarísima, porque creo que una persona que aporta, que entrega contenidos, que está 100% con la camiseta puesta… que, además, dicen que ‘eres un gran profesional, una persona que trabaja mucho, que nos encantó estar contigo’, tanto en pantalla como fuera. Entonces tú crees que todas las cosas están bonitas, pero igual finalmente ellos tampoco están muy conformes con el trabajo que estás realizando. Pero más allá de eso, Raquel (Argandoña) y el panel completo se portó súper bien y me escribió”, finalizó.
Fuente: BioBioChile