Según cifras de INE, entre 2000 y 2015 la tasa específica de mortalidad pasó de 16,2 a 26,2, lo que representa la cantidad de muertes por cada 100 mil personas, a causa de esta enfermedad
La diabetes es una enfermedad que afecta a muchas personas en el mundo. Cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que las muertes por esta patología, en el 2000 eran inferior a un millón, cifra que alcanzó los 1,6 millones en 2015. Es por eso que en 1991, la Federación Internacional de Diabetes (FID) y OMS fijan el 14 de noviembre como el Día Mundial de la Diabetes (DMD).
Según reportes del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) la tasa de mortalidad a causa de esta enfermedad, se incrementó en 10 puntos entre el año 2000 y el 2015. Esto significa que por cada 100 mil personas, antes fallecían 16,2 y actualmente 26,2.
La buena noticia es que un estudio publicado por el Dole Nutrition Institute, confirmó que la vitamina A, conocida como la vitamina que ayuda a mejorar la visión, ahora tiene otra razón para ser favorable para la salud. Entre sus beneficios se conocen, la producción de glóbulos blancos, reconstrucción de huesos y regeneración de la piel, y la nueva función de mejorar el funcionamiento de las células beta en los diabéticos.
En los inicios de nuestra vida, la vitamina A juega un papel importante en el desarrollo de las células beta, lo cual conduce a un funcionamiento apropiado para combatir la inflamación en la época de adultez. Las células beta, que almacenan y liberan la hormona insulina para ayudar a regular los niveles de glucosa en la sangre, tienen un gran receptor superficial celular de vitamina A.
Los investigadores descubrieron que cuando se bloqueaba la superficie de vitamina A sobre las células beta, había un deterioro de secreción de insulina del 30%. Básicamente, sin la vitamina A, las células beta se volvían menos resistentes a las inflamaciones. Cuando la célula se vuelve completamente deficiente de vitamina A, esta muere. Esto conduce a entender la formación de células beta en etapas iniciales tanto en diabetes tipo 1 como en diabetes tipo 2 y a cómo podemos intervenir.
Aunque deseamos que los diabéticos tengan suficiente vitamina A en su cuerpo, algo demasiado bueno puede implicar riesgos. Más preocupante es una sobredosis de vitamina A por medio de los suplementos ya que esto puede conducir a una osteoporosis y deseos secundarios no deseados dentro del auto control de la diabetes, proporcionando mayor evidencia de que los suplementos son innecesarios y potencialmente dañinos. Sin embargo, exceder el límite superior por medio de las comidas no implica riesgos, generando otra razón por la cual utilizar los alimentos como medicinas.
La mejor manera de obtener una dosis saludable de vitamina A es por medio de las frutas y vegetales. En promedio, un adulto necesita aproximadamente entre 700 a 900 microgramos de vitamina A por día. A menudo encontramos la vitamina A en la naranja y en los alimentos amarillos, notando el beta-caroteno que reconocemos comúnmente. Inmediatamente vienen a nuestra mente las zanahorias, los mangos, las batatas y la calabaza sidra, pero no descarte la col, el brócoli o las espinacas ya que estas también contienen una cantidad saludable de vitamina A. Estas comidas no solamente ayudarán con la diabetes, sino también con la salud ósea. Como comparación, una batata entera contiene aproximadamente 1.400 microgramos mientras que una papa y una espinaca cocinada rinden aproximadamente 570 microgramos por taza. Por lo tanto, no es de sorprenderse que el platillo de entrada de Dole batatas rostizadas con espinacas solo tenga 10 ingredientes naturales, pero aun así un 690% de su necesidad diaria de vitamina A relacionada a los alimentos.