Más de 100 personas resultaron heridas el jueves en Skopje en enfrentamientos provocados por la irrupción en el Parlamento de manifestantes nacionalistas airados, anunció este viernes la policía de Macedonia.
“Setenta ciudadanos, 22 policías y tres diputados están siendo atendidos en el hospital central de Skopje, y otras siete personas ingresaron en distintos establecimientos médicos” de la capital, añadió la misma fuente en un comunicado.
Las heridas no son graves, según los médicos, y la policía indicó que la situación “había vuelto a la normalidad alrededor del Parlamento y en los barrios del centro de la ciudad” este viernes.
El jueves, la elección de un nuevo presidente en la Asamblea, el albanés Talat Xhaferi, por la coalición de los socialdemócratas (SDSM) de Zoran Zaev y de los partidos albaneses, provocó el enojo de los manifestantes nacionalistas, simpatizantes de la derecha (VMRO-DPMNE), que la consideran injusta.
Una corresponsal de la Agence France-Presse vio al líder de la oposición de izquierdas, Zoran Zaev, con el rostro ensangrentando, en el caos provocado por la irrupción en el hemiciclo de los seguidores del VMRO-DPMNE del ex primer ministro Nikola Gruevski.
El VMRO-DPMNE encabezó las legislativas anticipadas de diciembre, que debían sacar al país de la crisis política en la que estaba sumido. Pero el partido derechista no alcanzó la mayoría de los 120 diputados de la Asamblea.
El presidente de derechas, Gjorge Ivanov, le negó además a Zaev la posibilidad de formar un gobierno de coalición con los partidos albaneses, una alianza que habría conseguido la mayoría en el Parlamento, con 67 de los 120 escaños.
Los seguidores del VMRO-DPMNE llevan semanas manifestándose a diario en Skopje porque consideran que un gobierno de la SDSM y los partidos albaneses perjudicaría la unidad nacional de Macedonia.
Rechazan, entre otras cosas, que se conceda al albanés el estatuto de idioma oficial en el conjunto del país, un hecho que consideran como la primera etapa de la desarticulación del Estado.