Las lluvias y avalanchas que golpean la costa norte y central de Perú no respetaron ni a los muertos. En la región Lambayeque, deudos acudieron a un cementerio completamente inundado para tratar de poner a buen recaudo los restos de sus seres queridos.
Según imágenes registradas por la Agence France Presse (AFP), varias personas llegaron al camposanto de San José, completamente inundado, para destapar los nichos y retirar con cautela los restos de sus familiares enterrados allí y que eran amenazados por la inundación. El agua deterioró varias tumbas y dejó expuestos los cuerpos.
“Es una verdadera odisea poder ingresar a visitar a nuestros difuntos, además se ha convertido en un foco infeccioso para toda la población“, dijo una de las visitantes a la radio RPP.
El alcalde de San José, Macario Fiestas, se comprometió a retirar las aguas con motobombas para evitar focos infecciosos, según detalló la emisora.
Las muertes a causa de lluvias, inundaciones y avalanchas en Perú suman 84 desde enero, tras registrarse cinco nuevas víctimas en las últimas horas, según informó el jueves el gobierno, que trabaja para liberar carreteras bloqueadas.
De acuerdo con el último reporte oficial del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), además de los fallecidos, se registran 20 desaparecidos y 209 personas heridas.
El gobierno contabiliza 111.098 damnificados -que lo perdieron todo-, 666.534 afectados -con daños parciales o menores- y más de 149.000 viviendas dañadas.
