Tras ser afectados por una de las catástrofes más devastadoras de nuestro país, los funcionarios del recinto asistencial llevaron a cabo una hermosa campaña solidaria para ir en ayuda de las familias damnificadas. Con esta noble misión en sus corazones, los trabajadores hospitalarios decidieron ayudar con la entrega de uniformes escolares a los alumnos de la Escuela Las Corrientes, ubicada en la comuna de Constitución.
Una de las funcionarias propulsoras de esta cruzada solidaria fue Nancy Gómez, secretaria de la Subdirección de Recursos Humanos, quien explicó que “luego de ver todo los daños que dejaron los incendios forestales en el sur de nuestro país, no podíamos quedarnos ahí, sin ayudar y de brazos cruzados. Por eso, nos juntamos con más compañeros de trabajo y comenzamos una campaña que llamamos “Devolviendo la Mano” debido a lo que nos tocó vivir a nosotros con los aluviones el año 2015. Por eso quisimos ayudar, salió todo bien y muy bonito. Agradecemos a todos los funcionarios que hicieron posible toda esa alegría en los niños”, explicó una de las organizadoras de la campaña.
Días antes del inicio del año escolar, los uniformes escolares estaban en las manos de los cerca de cien alumnos que dan vida a la Escuela Las Corrientes. Una noble mano amiga que agradeció la directora del establecimiento, Ingrid Rojas, tras indicar que “es una bendición para nuestra comunidad escolar después de tanto sufrimiento. Los funcionarios fueron unos ángeles que aparecieron durante la tragedia. Nos extendieron sus manos solidarias para ayudar a nuestros alumnos y darle una alegría en medio de tanto sufrimiento, ya que muchos de mis alumnos perdieron sus hogares”.
Uno de los pequeños beneficiados fue Jeremías, quien se mostró muy emocionado tras recibir su indumentaria escolar. “Aquí hay muchas personas que se le quemaron sus casas por lo que había mucho niños que necesitan sus útiles escolares…”. Ingrid junto a sus cuatro hermanos, también agradeció la ayuda recibida.” Me parece muy bueno esto porque así mi mamá aprovecha de guardar la plata para otras cosas. Además porque uno piensa que la mamá no tiene cómo comprar todas las cosas”. Su amigo Sebastián por su parte, quiso mandar un caluroso agradecimiento tras indicar que “quiero agradecer mucho a los funcionarios por todo lo que hicieron por nosotros”.
Toda esta ayuda refleja la solidaridad de los funcionarios hospitalarios, quienes quisieron devolver esta mano amiga. Para el director (s) del Hospital de Copiapó, Jaime Feijoó, este gestó es motivo de orgullo para la institución, sobre todo, por la rapidez y motivación de todos por colaborar. “Como dirección queremos extender nuestros reconocimientos a la comisión organizadora y a todos nuestros funcionarios que ayudaron a paliar esos difíciles momentos que están viviendo nuestro compatriotas en el sur de nuestro país. A nosotros nos tocó sufrir el año 2015 tras el paso devastador de los aluviones y sabemos lo que se siente estar en esas condiciones. Estoy seguro que toda esa alegría de los alumnos llenó el corazón de todos los funcionarios que quisieron ayudar de manera voluntaria. Mis reconocimientos hacia todos ellos y espero que todas esas familias afectadas puedan puedan retomar su normalidad lo más pronto posible”, señaló la máxima autoridad hospitalaria.
Sin duda, una gran campaña que permitió que los alumnos comenzaran su año escolar con toda la energía, amor y solidaridad enviadas desde los corazones de los funcionarios del Hospital de Copiapó.