La iniciativa, presentada por un grupo de diputados de la UDI, manifiesta que las cadenas farmacéuticas deberán disponer de un sistema en línea, de libre y continuo acceso para la población, en donde se informe el precio de venta y stock de todos los medicamentos susceptibles de consumo humano, detallando, además, las normas de contenido obligatorio.
Considerando que en Chile la venta minorista de productos farmacéuticos se encuentra fuertemente concentrado en tres cadenas, presentando en su conjunto a más del 90% de las ventas a nivel nacional, el diputado Enrique Van Rysselberghe (UDI), junto a un grupo de parlamentarios del mismo partido, presentó un proyecto que modifica la Ley 20.724, sobre Regulación de Farmacias y Medicamentos, para fijar la obligación para estos establecimientos de incorporar en sus sitios web el precio y stock de los productos que ofrezcan, además de su disponibilidad en cada local de venta.
La moción, enviada para estudio a la Comisión de Salud e ingresada el pasado 15 de abril por el diputado Van Rysselberghe, también requiere de las empresas la individualización de los medicamentos por su nombre de fantasía y su equivalente; denominación del compuesto químico; el código SKU asignado; el laboratorio elaborador de la sustancia; descuentos y beneficios asociados al mismo; cantidad por envase; su solución y número de registro en el Instituto de Salud Pública.
Asimismo, se indica que cada cadena farmacéutica, deberá actualizar dicha información periódicamente dentro de un plazo desde la modificación del precio y tendrá la obligación de dotar a dicha página de un buscador que permita consultar el precio y el stock de un medicamento determinado por región, comuna y localidad.
El proyecto consagra estas obligaciones a las cadenas farmacéuticas que cuenten con a lo menos cinco locales de ventas. Lo anterior como una forma de evitar afectar a las micro o medianas empresas, cuyas cargas legales importan costos difíciles de afrontar.
Finalmente, la iniciativa modifica el Código Sanitario particularmente en lo relativo a las anteriores modificaciones que experimentó en virtud de la Ley 20.724, que establece que cada local de expendio de medicamentos debe contar con una lista de precios accesibles al público en soporte papel o electrónicamente.
